
Imagínate que sales a recolectar setas. Venga, que es otoño.
Sales a por setas, pero llegas al bosque y te pones a recoger todo lo que vas encontrando por el suelo.
Alguna seta habrá seguro, pero… Has dedicado tiempo y esfuerzo a algo que ni te sirve ni necesitas, en vez de recoger a por lo que has venido.
Traduciendo esto al mundo de marketing y ventas: es lanzar mensajes como sea y por donde sea sin hacer ningún tipo de segmentación.
Me pasa mucho con la publicidad de Youtube: me salen vídeos en otros idiomas, bailes made in Bollywood o servicios que no corresponden para nada con mis intereses. ¿Cuántas de esas ofertas van a convertirme en cliente? Ninguna.
¿Qué necesitas saber para empezar a segmentar?
Quién es tu cliente ideal.
Sus gustos, sus intereses, qué problemas tiene y cómo puedes ayudarle a cubrir esas necesidades y quitar esos «dolores» que tiene.
¿Conoces sus hábitos? ¿Qué canales de comunicación prefiere? ¿Con qué mensajes, productos o perfiles se siente más identificado?
Cuantas más respuestas tengas a esas preguntas, mejor le conocerás y mejor acertarás con tu mensaje. Si vas a un público más profesional de a partir de 40 años, es difícil que les encuentres en TikTok. Si vas a vender a los adolescentes, no les busques en LinkedIn.
Define tu producto en función de tu público y enfócate en solucionar su problema.
Las ventas crecerán como setas ;)
Si necesitas ponerte en marcha con la definición de tu identidad verbal, tu mensaje perfecto para tu cliente perfecto, reserva ahora una consultoría gratuita inicial conmigo y ¡manos a la obra!
Comments